¿Sabías que el 90% de todo el transporte de mercaderías se efectúa en contenedores por vía marítima?
¡El 90%!
Desde los alimentos que consumimos a diario hasta materias primas como textiles, madera, y sí, efectivamente, incluso el polietileno que empleamos en la industria del embalaje: todo se mueve por carga marítima.
Por eso, cuando se produce una pandemia como la que estamos viviendo, el efecto en unos servicios de los que dependemos todos, es catastrófico.
Con la pandemia el transporte se ralentiza.
En algunos casos incluso se detienen por completo.
El sector se desestabiliza, y uno de los resultados, como imaginarás, es el incremento exponencial de las tarifas del transporte, hasta tal punto que, si antes de la pandemia podías fletar un contenedor desde China a la costa oeste de Estados Unidos por unos 2.000 dólares, ahora puedes esperar una factura de alrededor de 20.000 dólares.
¿Qué ha provocado el desatinado aumento en los precios del transporte en todo el mundo?
Las tarifas con las que nos vemos obligados a trabajar hoy son la combinación inédita de toda una serie de complejos factores que pocos podían haber predicho, y que han provocado esta “crisis invisible” en el transporte internacional.
Por un lado, con la llegada de la pandemia, el comercio electrónico experimenta en un solo año el mismo porcentaje de aumento de los últimos 10 años.
Esa enorme cantidad de productos provenientes de las fábricas de Asia que los clientes compran desde sus hogares tiene que transportarse de alguna manera a sus destinos.
Y tiene que hacerlo precisamente en el mismo momento en el que la OMS declara una pandemia mundial.
Momento en el que gobiernos e instituciones privadas inician una carrera desesperada por aprovisionarse con insumos para enfrentar las consecuencias de esta catástrofe sanitaria, como cubrebocas, pruebas y respiradores.
Aumenta la demanda y, consecuentemente, aumentan las tarifas marítimas.
¿Qué sucede en los puertos?
Muchos colapsan.
Las dificultades de logística y saturación superan sus capacidades y protocolos.
El costo de los combustibles derivados del petróleo aumenta un 30% en comparación con años pasados.
Se cometen errores provocados por lo inédito de la situación.
Las navieras cancelan o suspenden muchos contratos de fabricación de contenedores y buques al imaginar que una pandemia provocaría un descenso drástico de importaciones.
Pero, pasan los meses y la tendencia es la contraria a la esperada.
Según IBM, la pandemia acelera la tendencia hacia la compra digital unos cinco años.
Y el mundo no está preparado para esa nueva realidad.
Lógicamente, esas primeras cancelaciones provocan retrasos importantes en el transporte y afectan a la disponibilidad y el precio de los productos en todo el mundo.
¿Seguirá la crisis “invisible” de las tarifas marítimas?
Y, por cierto, ¿por qué “invisible”?
Empleamos el adjetivo invisible por dos motivos:
a) Se trata de una grave crisis mundial a la que apenas se le da cobertura mediática
b) El consumidor percibe una subida importante de precios, pero desconoce el motivo.
¿Seguiremos viviendo con las consecuencias de la crisis de contenedores?
En estos momentos se estima que se están construyendo un gran número de barcos, aproximadamente el 15% de la flota actual.
Se espera que cuando estos comiencen a circular a mediados o finales del 2022 podamos ver una cierta estabilización o incluso cierta tendencia a la baja de nuevo.
Aunque, eso dependerá también de la actuación de las navieras.
Hay que tener en cuenta que este sector se había visto azotado por pérdidas importantes provocadas por el exceso de competencia y los bajos precios.
¿Querrán volver a esas condiciones desfavorables habiéndose acostumbrado a los mayores beneficios resultado de la pandemia?
Es muy posible que se nieguen.
Pero también es muy posible que el panorama mejore post 2023.
Se prevé que, con la llegada de los nuevos barcos y la modernización de toda la logística de transporte marítimo, los precios vuelvan a recuperarse.
Pero hasta entonces, ¿Cómo podemos navegar esta crisis?
¿Cómo puedes gestionar la crisis de los contenedores?
Una palabra: agente.
Dos, en realidad: agente de carga.
Confía en los especialistas que conocen a fondo cada una de las cartas que se juegan en este sector.
Trabaja con un agente que te ayude a gestionar el transporte de cargas de la manera más eficiente y económica posible.
Un agente que te ayude a planificar mejor tu logística.
Que te consiga los mejores tratos preferenciales por volumen.
Que te ayude a optimizar los trámites y los servicios de logística internacional dando prioridad a los viajes con cargas de ida y vuelta.
Eso, es precisamente lo que hacemos en nuestra empresa de embalajes en Valencia, y eso es lo que nos ha permitido mantener el coste de nuestros materiales a precios razonables.
Y eso es lo que nos permite no vernos obligados a traducir el peso de la crisis de transporte en elevados costes para nuestros clientes, manteniendo nuestros precios a niveles asequibles.
Esa es, y será siempre nuestra misión: adaptarnos ágilmente a los factores externos para ofrecer a nuestros clientes el mejor y más asequible embalaje en el mercado.
¿Tienes dudas acerca del alza en el precio de los materiales? ¿Buscas soluciones integrales de embalaje económicas para tu sector?
Estaremos encantados de resolverlas.